martes, 26 de marzo de 2013

La Vinotinto Necesita Variantes Tácticas


            El fútbol no da respiro, no hay tiempo para relajarse, la presión de obtener resultados favorables siempre está presente, cada partido es un examen; en el caso de la Vinotinto, contra Colombia se viene una prueba de fuego. Del encuentro anterior en Buenos Aires quedó una mala sensación, no solo por el 3-0 en contra, sino porque Venezuela evidenció una vez más pocas variantes tácticas; sería más fácil escudarse en excusas tipo “es que Argentina tiene al mejor jugador del mundo”, pero no, la cuestión es más simple aún: Venezuela va a los juegos sin un Plan B. Después del enfrentamiento con la albiceleste, Oswaldo Vizcarrondo declaró “el partido estuvo muy equilibrado hasta que nos marcaron el primer gol..." o sea, ¿si se recibe un gol entonces ya se perdió el encuentro?. La Vinotinto arrancó el encuentro cerrando todos los espacios por el medio y custodiando muy rigurosamente a Messi, pero al D.T. Sabella le bastó únicamente con abrir la cancha y jugar por las bandas para desordenar todo el planteamiento inicial de Farías y de allí en adelante “la pulga” hizo lo que quiso cuando quiso. Lo más grave es que Venezuela solo llevó el Plan A (mantener el empate a cero) pues no hubo un escenario prediseñado en caso de ir perdiendo 1-0 ó 2-0… nada diferente, ninguna variable, sin formas de agredir al rival. La segunda parte sobró, las dos ocasiones de gol generadas por la Selección Nacional fueron consecuencia de la relajación de los australes.

César Farías.
Imagen tomada de 6topoder.com


           Esto no solo sucedió contra Argentina, en Quito contra Perú y en Puerto La Cruz contra Ecuador, ganando en ambos casos por 1-0 en el primer tiempo, Venezuela no supo manejar el resultado y comenzó a desordenarse apenas los técnicos contrarios decidieron modificar los esquemas de sus conjuntos. Por eso, el primer responsable de todas las dificultades del juego venezolano es César Farías, pues de él depende el acomodo y el orden de nuestros futbolistas a medida que transcurre el encuentro. Tal cual como sucede en la naturaleza: adaptarse o morir.

         Ahora toca ganarle a Colombia, una selección que viene en muy buena racha, con futbolistas de primer nivel en todas sus líneas y un técnico excelente en José Pekerman. Venezuela debe apelar como siempre, a su Plan A, el cual consiste en mantener el orden defensivo y aprovechar la fortaleza de nuestros atletas en las jugadas de balón detenido, no obstante, sino se tienen previstas otras variantes tácticas ofensivas para agredir al rival y para adaptarse a los cambios que pudiesen implementar los cafeteros durante el encuentro, me temo que nuestras probabilidades de ganar se reducen. La capacidad de nuestros futbolistas está fuera de cualquier duda, falta saber si Farías puede dejar a un lado su arrogancia habitual e innovar tácticamente para asegurar un buen resultado.

            Hay que ganar sí o sí.

            ¡Vamos Vinotinto!


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viernes, 22 de marzo de 2013

La Mentalidad Hará la verdadera Diferencia


            El condicional es un tiempo bastante peligroso para conjugar en el lenguaje del deporte, los “sería”, “hubiera”, “estaría”, son términos bastante imprecisos, reveladores de una posible realidad paralela que no es, justificando, en la mayoría de las ocasiones, una situación conformista. Por eso, cuando escucho y leo a muchos periodistas y fanáticos venezolanos expresar “si la eliminatoria se acabara hoy, Venezuela estaría en el mundial”… bueno, me disculpan la expresión, pero eso en el argot popular se llama paja pelúa, es decir, una masturbación mental alimentando especulaciones sin sentido. Tampoco hay que irse al otro extremo y ser fatalistas, pero una euforia anticipada puede ser letal para la mentalidad de los jugadores debido a:

1.  La Vinotinto ha dejado puntos en partidos donde no podía ceder opciones al rival, llámese en Lima contra Perú y como locales contra Chile y Ecuador; fueron encuentros donde lo preocupante no fue el resultado final, sino el desarrollo del mismo donde Venezuela mostró serias lagunas defensivas y pocas variantes tácticas ofensivas, recordemos, no todo puede ser “Dásela a Arango, que él Resuelve”. En este punto, el principal responsable y la principal fuente de soluciones comienza por el cuerpo técnico encabezado por César Farías.
2.    Ningún rival con tres dedos de frente subestimará a Venezuela, el cuento de la Cenicienta se acabó, es hora de cumplir con las expectativas. Ahora tocan plazas como Buenos Aires donde sacar un empate sería un buen resultado. Argentina viene con cierta sed de revancha, pues, la única derrota de los albicelestes en el actual proceso de eliminatorias fue en Puerto La Cruz.
3.    No se ha ganado nada todavía, la meta está realmente lejos aún, toca trabajar como obreros y olvidarse de los “hubieras”. La posición en la tabla hay que mirarla cuando llegue el último partido de las eliminatorias.

Si Venezuela afronta el partido de hoy pensando en empatar, muy probablemente pierda, si piensa en los tres puntos, también se puede perder, pero las probabilidades de sacar un buen resultado son mayores si el planteamiento va más allá de poner el autobús alrededor de Dani Hernández. Nuestros futbolistas deben jugar con el mayor orden táctico posible y sin miedo. Si se gana o se empata, no debe hablarse de “sorpresa”, pues la Vinotinto es capaz de eso y más… si se pierde estaría en los cálculos lógicos, la diferencia está en la forma, en el cómo, es decir, en la mentalidad que tenga el cuerpo técnico y cada uno de los jugadores.


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