Se
acabó el sueño mundialista, pero no hay lugar para las lamentaciones, lo
verdaderamente importante es la experiencia, ¿pero habremos aprendido realmente? La
respuesta no será posible obtenerla a corto plazo, menos, si en lugar de
analizar las cosas lo más objetivamente posible, nos ponemos a buscar excusas
como “casi se llegó, casi fue gol, el árbitro nos jodió”, son sólo
pretextos burdos para ocultar la cruda realidad, la cual no es más que anoche
contra la selección de Chile, la Vinotinto – una vez más - no tuvo argumentos futbolísticos para superar a su rival, 3 a
0 es un resultado muy contundente. César Farías se cree el José Mourinho
venezolano, siempre anda generando polémicas con sus declaraciones y peleas
constantes con los medios de comunicación (¿recuerdan las declaraciones de Lino
Alonso tras el partido contra Colombia?), mientras el portugués ha ganado
un montón de títulos importantes, si mal no recuerdo, Farías solo tiene un
trofeo de segunda división de Venezuela. “Casi” no es un título, “casi” no es una meta, “un
buen papel” es principalmente útil para escribir pendejadas o limpiarse.
¡BASTA
DE EXCUSAS!
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| Imagen tomada de ferplai.com |
Sería
muy injusto tirarle todo el excremento al cuerpo técnico de la selección, el
verdadero origen del pozo séptico se encuentra más arriba, en la Federación
Venezolana de Fútbol, la cual se ha encargado de no construir estructuras
acordes con el supuesto crecimiento del fútbol venezolano y a tomar decisiones basadas más en lo político que en lo deportivo: le quitaron el patrocinio a Empresas Polar, los últimos amistosos no han servido para una preparación significativa, ya nadie se pregunta
por el Centro de Alto Rendimiento en Margarita, nuestros estadios se encuentran en un nivel bastante
malo, casi todos son estadios olímpicos más no estadios de fútbol y hace
milenios que no llevan un partido oficial a Caracas, a ver si con eso, jugar de
local hubiese pesado algo más. Además, la FVF ha desestimado constantemente la
idea de traer personal técnico extranjero con el argumento estúpido de la nacionalización,
cosa que también se ha reflejado al momento de seleccionar a los futbolistas.
¿Cómo es posible que César “Maestrico” González sea titular?, ¿cuál es el nivel
de Agnel Flores?, después de tanto pujar para traer futbolistas con doble
nacionalidad como Amorebieta y Julio Álvarez ¿por qué no los utilizamos?... el
trasfondo de estas decisiones es puramente personal, pues jugadores como
Grenddy Perozo , C. González y Flores juegan en el Deportivo Táchira – ojo, no
tengo nada en contra de los aurinegros – equipo dirigido "casualmente" por el
hermano de César Farías. En una federación seria, este tipo de decisiones
subjetivas deberían ser, cuando menos, increpadas, pero no, estamos en Venezuela,
donde el amiguismo es la ley.
Quisiera
equivocarme, pero el futuro de nuestra Vinotinto es bastante negro si no se
comienza por cambiar a los directivos de la FVF y luego a todo el cuerpo
técnico. Después del empate 1-1 contra Ecuador en Puerto La Cruz, muchos
fanáticos y algunos periodistas ingenuos declaraban “si la eliminatoria se
terminara hoy, Venezuela estaría en el mundial”, once meses después estamos con
los dos pies fuera de Brasil 2014. No se puede vivir de ilusiones ni de
actitudes complacientes, desde ese día la selección de Venezuela volvió al
camino de la mediocridad, lamentable, especialmente si se cuenta con
futbolistas que pueden dar un nivel mucho mayor al que le dejan demostrar.
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