La Vinotinto respondió ante el reto histórico, ganó por primera vez en La Asunción, renovando sus esperanzas de clasificar por primera vez a un mundial. Por fin nuestra selección se olvidó de jugar al pelotazo como primera opción ofensiva. Farías acertó de lleno con el once titular al ubicar a Luis Manuel Seijas en la medular - produjo mucho más manejo, salida y faltas recibidas, lo derivando en más opciones a balón detenido - y al encarador Josep Martínez como media punta (toda una agradable sorpresa), de esta manera, Venezuela mostró mayor movilidad, fluidez y agresividad. Roberto Rosales hizo un buen trabajo en el lateral izquierdo, también Lucena en la contención, así como Arango junto a César González en la creación; Rondón, el matador de la noche, tuvo máxima efectividad en las 2 ocasiones claras que tuvo, además, ejerció de pivote para generar segundas jugadas. Más allá de las figuras individuales, el trabajo colectivo fue excelente, la actitud de los jugadores ha vuelto a ser admirable y se notó a una Vinotinto bien engranada.

Imagen tomada de futbolfixture2012.com.ar

Siempre es bueno señalar los errores para intentar corregirlos, apenas estamos a mitad de la eliminatoria, queda muchísimo trabajo pendiente. La Vinotinto falló (otra vez) en un par de salidas de la última línea defensiva haciendo la trampa del fuera de juego. Nuestro lateral derecho Alexander González sufrió bastante todo el partido para contener las subidas del lateral izquierdo paraguayo, Miguel Salmudio, en el primer tiempo y, en el segundo tiempo contra Marcelo Estigarribia. No obstante, ante cada filtración en la defensa venezolana apareció providencial Dani Hernández para tapar todo. En mi opinión, Farías tardó mucho en mandar los cambios, pero más allá de ese detalle, su gran virtud fue no hacer retroceder al equipo para asegurar la ventaja (como en Perú por ejemplo), más bien Venezuela se mostró con intención de ofender durante todo el encuentro, aún con los dos goles a favor.

Estamos en la eliminatoria más pareja del mundo. Anoche la Vinotinto recordó que, si bien el éxito nunca está garantizado en el fútbol, jugando de forma ordenada y con mentalidad ofensiva será más probable alcanzar la meta de clasificar a Brasil 2014. Once puntos en ocho partidos nos da un balance positivo a pasar de una sexta posición muy mejorable, igualmente, debemos tener en cuenta: de los ocho partidos restantes cinco serán como local. La oportunidad está al alcance.

¡VAMOS VENEZUELA!

P.D: primer partido desde la Copa América que Venezuela gana sin Tomás Rincón, esperemos que pueda estar contra Ecuador.

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